NetEscrito 6
N° 318
Vida,
Mundo
¿Ilusión mental?
Lo que es rápido para nosotros,
en relación con el ritmo de nuestra vida, de nuestros mecanismos
intelectuales y sensoriales, será "lento" para un efímero
insecto cuya vida
dura sólo veinticuatro horas. Para un ser imaginario cuya vida
se prolongara millones de años, la evolución sería
un fenómeno muy rápido. Para Dios, a quien ni siquiera
podemos concebir en relación con el tiempo, puede muy bien haber
sido instantáneo.
Pierre Lecomte de Noúy
Suposición,
simple suposición y nada más...
El pensamiento hállase difundido a través de todo el organismo,
dominándolo con absoluta soberanía. Nuevas cosas están sucediendo, o,
más exactamente, es el orden externo que vuelve a verse honrado en todos los
dominios del pensamiento humano.
León Daudet
El tema a tratar intento entenderlo pero el entendimiento es racional, entonces
¿cómo abordar una realidad supraracional? Desde
joven rechacé la praxis ateo-materialista. Fue grato ir conociendo la
opinión asertiva
de connotados pensadores que reforzaron en mi ese natural rechazo a la
posición cerebro-material consolidando mi idea
mento-espiritual de la Vida.
Al estar lo supramaterial más
allá del alcance del método científico, hablemos
entonces sobre la base de suposiciones, destacando que de manera cada
vez más
corta en el tiempo los dogmas avalados por el método
científico caen dando paso a nuevos paradigmas. Mi rechazo
a una serie de dogmas materialistas como el darwinismo y el
Big-Bang dio paso entre otros conceptus a la personal idea del God-Bang.
Supongamos que llegas a donde
en este instante te encuentras y lo haces en tu cuerpo mental que viene
a verte desde la cuarta a la tercera dimensión.
Estás en una doble personalidad de tu vida, la densa actual y la
menos densa inmediatamente superior.
¿Quieres saber cómo te verías a ti mismo en la
forma física bajo la percepción de la forma de vida del
plano inmediatamente más sutil al nuestro? NO TE VERÍAS. Todo lo que
para ti hoy es real en tu forma física, es un vació
inexistente para tu ser mental, porque en él actúas con
una mente programada por el alma para reconocer como real el mundo
mental y apreciar que el mundo
físico es una ilusión de percepción de la mente
humana que tu alma programó para esta humana actual forma de vida nuestra. A
su vez, si desde el mundo de la quinta dimensión te visitas a tu
ser de cuarta dimensión mental: NO TE VERÍAS dado que la
mente del alma fue programada para ese plano dimensional y no el de la dimensión inferior menos sutil. En
resumen, LO ÚNICO REAL ES DIOS, sin embargo mientras estamos en la
ilusión no debemos afirmar que este nivel material es irreal,
hacerlo nos crea riesgos al suponer que lo irreal no nos puede afectar,
sugiero respetar los riesgos de noxas que en esta
ilusión-realidad nos dañarían si ellas nos atacan.
Esta suposición me
lleva a replantear en el presente NetEscrito un tema que
intentaré exponer sin ser místico, filósofo,
vedanta ni físico teórico. Ya cristianos y teólogos han postulado que:
Para los de la Ciencia Cristiana de Mary Baker Eddy: "Dios
es todo lo que verdaderamente existe, la materia es una ilusión.
Toda apariencia
de
materia o de experiencia mortal es solo una ilusión, o un
sueño. Todo lo
que existe es Dios. Cuanto más real aparece el
Amor divino ante
nosotros, más vemos la irrealidad de la materia".
Para algunos teólogos: La energía divina
nos hace comprender la irrealidad de la materia. La materia no es otra
cosa que
la condensación física de la actividad mental. La
materia emana de la
vibración cósmica e inteligente de DIOS.
*
Desde mi primer
libro de la
era precomputacional; desde mi primer libro
de la era computacional; desde mi primer libro de la era de InterNet,
más una vez me he preguntado: ¿Por qué escribo?
¿Por qué me molesto y a otros molesto al hacerlo? Hoy, al
esbozar el inicio del presente NetEscrito 6, el número 318 de la
serie personal del Portal MUNDO MEJOR, esa pregunta se hace insistente y
me lleva a pensar: ¿Para qué sigo escribiendo?
Como escritor atípico hay una variada serie de
puntuales detonantes que dan lugar a un título, una vez llegado
el título este da paso a los graduales elementos que se van
ensamblando en un nuevo escrito. El presente título se
motivó por un e-mail llegado desde España y dejado al
final del NetEscrito 5. La respuesta a la amable
Amiga Ciberlectora fue:
Amiga
La Respuesta es simple:
Para los más el tiempo es y es lineal.
Cuando estoy en Misión de escribir el tiempo es una
ilusión mental, por lo tanto actúa mi subconsciente
mental que siempre trabaja más allá del tiempo y del
espacio.
¿Cómo se logra?
Lo ignoro.
Pueden preguntar a Zoltan, Él lo sabe.
Fraternal saludo
El precedente escrito lo inicié con una duda:
Supongo que la vida es un
sueño y el morir un despertar; supongo que la vida es una
ilusión mental donde
lo que no es me parece ser sólido y real. Tanta
suposición hace dudar, ese
dudar da lugar a pensar: Qué es sueño, qué es
ilusión, qué es realidad...
Pero de la Fuerza subconsciente del Pensamiento que nos permite
ser y
vivir no
debemos dudar.
La Respuesta a la CiberAmiga de España y la duda precedente
motivaron
lo que a continuación se expondrá. Por lógica
será un Repetita Iuvant.
Digo que por lógica será una Repetición
útil porque reactiva en parte el
núcleo central de lo que escribo. Algo que debe ser reiterado
para
reforzar la acción del subconsciente en el cada día
más difícil período
de cambio que ya vivimos. Cambio que son más los que notan y
menor y más débil el
ímpetu de quienes intentan señalar que todo es normal y
está bajo
control.
*
Hace algunos años en un
mes Ciberpubliqué siete o más títulos sobre
temas variados y algunos extensos. Un amigo chileno-alemán,
destacado docente ingeniero informático, muy racional y
pragmático, preocupado me señaló que había
calculado en su computador lo que ese mes había escrito y
no le daba el factor tiempo para que lo hubiera logrado en ese breve
lapso de tiempo, más aun que trabajo y llevo una vida de humano
como cualquier persona. Eso lo tenía descolocado
matemáticamente pues sobre esa base yo no lo podía haber
logrado, era imposible para la
científica mentalidad.
Le dije que para su mente el tiempo y el espacio son
una realidad del mundo concreto y esa realidad le mostraba lo
que de manera lógica no calzaba con el factor tiempo.
Intenté darme a entender señalando que: Cuando estoy en
misión de escribir pareciera que el tiempo y el espacio son una
ilusión mental y como tal a mi subconsciente le sobra tiempo sin
importar cuánto escriba. Por lógica no me comprendió. Me pregunto: ¿Me comprendo yo? ¿O es que
Zoltan SÍ es real?
*
Todos parecen estar de acuerdo en que los primeros representantes de la
raza Cro-Magnon aparecieron hace alrededor de 30.000 años, en el
reciente Período Paleolítico. Estos hombres eran altos:
un metro ochenta y siete centímetros, término medio.
Poseían elevada frente, rostro ancho, nariz recta y barbilla
saliente, y una capacidad craneana mayor que la nuestra. Eran bellos
especímenes de humanidad. La cultura Cro-Magnon llegó a
su culminación probablemente hace 12.000 años.
Pierre Lecomte de Noúy
Somos dioses dormidos en la ilusión mental de un sueño
humano iniciado hace más de 30.000 años. Cada nacer es un
dormir y cada morir representa el correspondiente despertar como alma. El sueño de Vida
es necesario
para que nuestra alma individual crezca y se desarrolle al lograr
manifestar en lo ilusorio de la materia atributos que requiere para
progresar. Como almas estamos en etapa de crecimiento, desarrollo y
aprendizaje y lo hacemos en un plano dimensional más denso,
plano que lo es
gracias a la mente. Cada uno nace con un subconsciente mental
programado por el alma para, en ese plano, hacer lo ilusorio real y lograr tener
éxito.
Al igual que existe un universo escalar con diferentes niveles de
evolución para cada dimensión, existen mentes acordes
para actuar en cada nivel de evolución para la tercera, cuarta,
quinta, sexta, séptima dimensión o plano previo a nuestro
retorno como espíritus plenamente desarrollado, a nuestra
raíz en DIOS. De la misma manera existen niveles mentales
escalares acorde a cada plano de evolución. Hemos nacido en un
ciclo de vidas para la tercera dimensión, en cada
encarnación que es regida por el alma individual se nace con la
mente que permite, por programación subconsciente, sentir real
lo que para otras mentes más sutiles sería ilusorio.
Estamos mentalmente estructurados para que en esta ilusión de
vida en un mundo de ilusión material, lo sea real.
*
Breve necesario recordatorio de Cambio Climático
El cambio climático ha movilizado a científicos que lo estudian, a
ingenieros que buscan soluciones tecnológicas y a economistas que las
miden. Y empieza a atrapar también una dimensión espiritual que lo está
convirtiendo, en opinión de algunos, en la nueva religión del siglo
XXI. Una nueva espiritualidad ecológica. El lenguaje mesiánico y los
instrumentos casi religiosos que se utilizan rompen los esquemas
discursivos y calan en una opinión pública más escéptica ante causas
del pasado.
El ingeniero, doctor de Filosofía en la Universidad de Oxford,
destacado montañista chileno Rodrigo
Jordán, uno de los que dejó nuestra bandera en la cima
del Everest el día 15 de mayo de 1992, hace poco regresó de una
expedición a la
Antártica, de su relato extracto lo siguiente:
Es difícil dimensionar el cambio climático hasta que
ves sus consecuencias. En la base Palmer explican que las aguas
Antárticas han subido de 4 a 5 grados de temperatura en los
últimos veinte años. Debido a este fenómeno los
pingüinos Barboquejo y Adelia se han tenido que trasladar
más hacia el sur, a sectores más fríos y le han
dejado espacio a los Papúa que son subantárticos y
están más acostumbrados a estas tibiezas.
En las típicas fotografías en la entrada norte del Canal
Lemaire se aprecian dos montañas que parecen senos. Sin embargo,
como se ha ido derritiendo el hielo, se ha descubierto que en realidad
se trata de una isla y no parte del continente. El calentamiento global
y el retroceso de los hielos están dando paso a figuras
geométricas que antes se suponía no existían, o
que los mapas no habían registrado.
Nos tocó ver lluvias torrenciales algo inusual en la
Antártica. Las cosas en la Antártica están
definitivamente diferentes.
El estudioso
uruguayo Luis Seguessa afirmó que el debilitamiento de la capa de ozono
se produce por el consumo de aire por parte de los motores a combustión:
La
capa de ozono no es solamente un reservorio de oxígeno, sino también
una manta natural que nos protegía del inmenso frío del espacio
exterior y de la potente fuerza calórica del sol. Al perderla, estamos experimentando cambios abruptos de temperatura en un mismo día, y esto irá en aumento. Nuestros hijos y nietos merecen recibir un mundo como el que nosotros recibimos.
*
Más allá de la
racionalidad irracional de quienes se niegan a aceptar lo que se vive,
con justa razón hay gente que piensa y se da cuenta del brusco
Cambio Climático, algunos CiberLectores quedaron preocupados por el CiberEscrto titulado:
"El año después de" y me hicieron llegar sus inquietudes en
cuanto
cómo protegerse, qué lugar es seguro... Mi
modesta respuesta es y será:
Existe un sólo lugar seguro.
Ese lugar conviene encontrarlo, conocerlo, cuidarlo, protegerlo.
¿Su nombre?
UNO MISMO
Desde que se habló del debilitamiento en la capa de ozono
planteé la pregunta: ¿Esas radiaciones, no tan solo UV, además de lo físico, cómo
alterarán a la mente humana? El Cambio Climático y otros
factores están repercutiendo de manera negativa en la mente. Si
uno así lo reconoce y acepta, de inmediato el subconsciente
entra en estado de alerta y trabaja más allá del tiempo y
del espacio para ofrecernos mecanismos de protección frente al
cambio. Esta es la razón por la que rechazo el oficial
ocultamiento de la verdad, según ellos para evitar el
pánico, según mi opinión para que estemos inermes
frente al cambio.
Maya o Ilusión, concepto de la milenaria Enseñanza
Somos
el resultado de lo que hemos pensado.
Estamos formados y modelados por
nuestros pensamientos.
A cada instante estamos determinando la vida futura.
Buda
En la era post-diluviana, hace
unos 10.000 años, los Nefilim antes de dejar la Tierra
inspiraron a los rishis quienes escribieron un Saber Cósmico con
una serie de temas como lo son los de la Reencarnación, Karma,
Evolución y Maya. La milenaria Enseñanza de la
filosofía vedanta preservó este Conocimiento. Veamos que
nos dicen sobre lo Ilusorio de la Vida:
Los Vedas señalan:
Aunque
Maya
(ilusión) sea falsa o temporal, la fuente de Maya es la
Personalidad
de Dios, quien es Mahesvara, el Controlador Supremo. Maya es la
suma
de todos los fenómenos físicos que tratan de ocultar la
unidad
del ser absoluto. La ilusión material es llamada "Maya". Maya
quiere
decir irrealidad, decepción, olvido, "aquello que no es". Bajo
la
influencia de Maya, el hombre piensa que él puede ser feliz
dentro
del mundo material temporal. "Es por la ilusión que jiva
(mente)
está encerrada. Uno debería saber que la naturaleza es
ilusión
y que el Señor Poderoso es el hacedor de la ilusión".
Maya es la ilusión de tomar estos conceptos por
realidades, de confundir el mapa con el territorio. El mundo de maya cambia continuamente pues el universo es una
obra rítmica y dinámica. Maya por lo
tanto es un
exhortación para encontrar la verdad más alta en la cual el cuerpo es apariencia, por ser la realidad nuestra la de Consciencia pura.
La Filosofía Vedanta, la orden monacal
más antigua
existente, sobre el concepto de Maya Enseña:
Maya
declara que nuestra naturaleza real es divina: pura, perfecta,
eternamente libre. No necesitamos transformarnos en Dios, ya lo
somos. Nuestro verdadero Yo, el Espíritu, es uno con
Dios. ¿Pero si nuestra naturaleza es
divina porqué somos, tan lamentablemente, inconscientes de ello?
La respuesta yace en el concepto de maya,
o
ignorancia. Maya es el velo que cubre nuestra naturaleza real y la
naturaleza real del mundo que nos rodea. Maya es fundamentalmente
incomprensible: no sabemos porque existe, ni cuando comenzó. Lo
que sí sabemos
es que como cualquier forma de ignorancia, deja de existir cuando
amanece el conocimiento: el conocimiento de nuestra naturaleza divina. Dios es
la verdadera realidad de
nuestra existencia: en Dios vivimos, en Dios nos movemos, en Dios mora
nuestro Ser. "En
verdad todo esto es Dios" declaran
los Upanishads, los textos sagrados de la filosofía Vedanta. El
mundo
cambiante que vemos a nuestro alrededor se puede comparar a las
imágenes que miramos en la pantalla del cine: sin la pantalla
inmóvil e
incambiable en el fondo no puede haber película. Similarmente,
el
inmutable Dios – cimiento de la existencia desde el fondo de este
mundo impermanente, le otorga el sentido de realidad a esta
ilusión. Aún
para nosotros esta realidad está condicionada, como un espejo
torcido,
por el tiempo, espacio y causa (la ley de causa y efecto). Nuestra
visión de la realidad se ve aún más distorsionada
por la identificación
equivocada: tendemos a identificarnos más con el cuerpo, la
mente, y el
ego, que con el Atman, el divino ser que mora en nuestros interior. Esta
percepción errónea produce ignorancia y dolor en una
secuencia
interminable: identificándonos con el cuerpo y mente, le tememos
a la
enfermedad, la vejez, y la muerte; identificándonos con el ego
sufrimos
de ira, odio, y cientos de aflicciones más. Aún
así nada de esto afecta
al Atman, nuestra naturaleza real. Maya
se puede comparar con las nubes que tapan el sol: el sol está en
el
cielo pero la presencia de las nubes nos impide verlo. Cuando las nubes
se dispersan tomamos conciencia de que el sol estuvo allí todo
el
tiempo. Nuestras nubes – maya que aparece como egotismo, odio,
avaricia, lujuria, ira, ambición – son removidas cuando
meditamos sobre
nuestra naturaleza real, cuando nos ocupamos en acciones egoístas, y
cuando nos comportamos y pensamos consistentemente en una manera que
manifieste nuestra naturaleza real: esto es a través de la
veracidad,
pureza, contentamiento, humildad, resignación, auto control, y
paciencia. Esta purificación mental dispersa las nubes de Maya y
permite emerger a nuestra naturaleza divina en todo su esplendor. Shankara,
el gran sabio filósofo del siglo séptimo hindú,
usaba el ejemplo de la
soga y la serpiente para ilustrar el concepto de maya. Caminaba un
hombre por un oscuro y solitario sendero cuando vio una serpiente; su
corazón comenzó a latir fuertemente y su pulso se
aceleró. Pero al
acercarse un poco, pudo ver que su "serpiente" no era más que un
trozo
de soga enroscada. Una vez que se rompe la ilusión, la serpiente
desaparece para siempre. Similarmente,
caminando por el oscuro camino de la ignorancia, nos vemos como
criaturas mortales, rodeados por el universo de nombre y forma, el
universo condicionado por el tiempo, espacio y causación. Somos
conscientes de nuestras limitaciones, cautiverio, y sufrimiento.
Acercándonos para inspeccionar más de cerca vemos que la
criatura
mortal y el universo todo, son solo Dios. Una vez que se rompe la
ilusión, nuestra existencia así como el universo
desaparecen para
siempre. Vemos que Dios existe en todas
partes y en todo.
Sri Ramakrisna, maestro vedanta (1836-1886), Enseñó:
Se nos dice que un
viejo gurú estaba por concluir las lecciones secretas que había estado dando a
un alumno adelantado acerca de la omnipresencia de la Persona Espiritual
divina. Mientras el discípulo escuchaba, recogido y lleno de felicidad por
aprender, el sabio y anciano maestro decía: -Todo es Dios, el Infinito, puro y
real, ilimitado y más allá de los pares de opuestos, libre de cualidades
diferenciales y distinciones limitadoras. Éste es el sentido último de todas
las enseñanzas de nuestra santa sabiduría. El alumno comprendió y dijo: -Dios
es la única realidad. A ese Uno Divino podemos encontrarlo en todo, sin padecer
sufrimientos ni ningún otro defecto. Cada tú y yo es Su morada, toda forma es
una figura obnubiladora en cuyo interior habita el único e inactivo Activador.
Estaba exaltado; una oleada sentimental lo traspasó y se sintió luminoso e
inmenso, como una nube que, al aumentar su volumen, llega a ocupar el
firmamento. Cuando echó a caminar lo hizo con agilidad y sin peso. Sublime,
como la única nube en una completa soledad, caminaba por el medio de la
carretera, cuando un enorme elefante apareció en dirección opuesta. El cornaca,
sentado sobre el cuello del animal, le gritó: -¡Apártate!- Y los incontables
cascabeles de la red que cubría a la enorme bestia dejaron oír una cascada de
sonidos argentinos siguiendo el ritmo del suave e inaudible paso. El exaltado
estudioso de la ciencia vedantina, aunque lleno de divinos sentimientos, oyó y
vio al elefante que se aproximaba y se preguntó: —¿Por qué habré de dejar paso
a ese elefante? Yo soy Dios; el elefante es Dios. ¿Tendrá Dios miedo de Dios?—
Y así, intrépidamente y con fe, continuó en medio de la carretera. Pero cuando
Dios se acercó a Dios, el elefante arrolló su trompa en torno a la cintura del pensador
y lo arrojó fuera del camino. El suelo era duro y el discípulo se lastimó un
poco, pero su estupor era aún mayor. Cubierto de polvo, magullado y renqueando,
con mente confusa, volvió al maestro y le contó su rara experiencia. El gurú lo
escuchó serenamente y cuando el cuento hubo terminado replicó sencillamente:
—En efecto, tú eres Dios, y también el elefante. Pero, ¿por qué no escuchaste
la voz de Dios que desde el cornaca, que también es Dios, te pedía dejar paso?
Un santo
solía mirar sonriente los cristales de una lámpara. La
razón de su sonrisa era que al ver los variados colores del
prisma que eran falsos, pensaba que el mundo era igualmente ilusorio.
Teniendo los ojos cubiertos con el velo de maya, te quejas que no
puedes ver a Dios. Si quieres verlo, aparta tus ojos del velo de maya.
Si puedes descubrir la naturaleza de maya, la ilusión universal,
ella desaparecerá de ti, como huye el ladrón al ser
descubierto.
Hasta que uno no obtiene la visión divina, hasta que el toque de
la piedra filosofal no trasmuta el vil metal en oro, perdurará
la ilusión que nos hace pensar "yo soy el hacedor". Y hasta
tanto no cese esa ilusión, persistirá la idea: "Yo he
hecho esta buena acción", "yo he hecho aquella mala
acción". Maya consiste precisamente en ese sentido de
distinción y es a causa de ello que el mundo continúa.
Sólo cruza el océano de Maya quien llega a encontrarse
cara a cara con Dios.
Vivekananda, swami vedanta (1863-1902), sobre Maya dijo:
Casi todos habéis
oído ya la palabra "maya". Por lo general se la emplea, aunque
incorrectamente,
como ilusión o alucinación, o algo por el estilo. Pero la
teoría de maya forma uno de los pilares sobre los que se apoya
el
Vedanta, de modo que es necesario comprenderla bien. Os pediré
un
poco de paciencia, puesto que es grande el riesgo de equivocarse. La
más
antigua idea de maya que encontramos en la literatura védica,
tiene
el sentido de ilusión; pero en esa época no se
había
llegado aún a la verdadera teoría. Encontramos pasajes
como
éste: "Indra, por su maya, asumió diversas formas." Es
cierto
que aquí la palabra maya designa algo como magia, y hallamos
varios
otros pasajes donde tiene siempre la misma acepción.
Después,
el término maya fue perdido de vista por completo; pero durante
ese tiempo, la idea se desarrollaba. Más tarde, se
planteó
la siguiente pregunta: "¿Por qué no podemos conocer este
secreto del universo?" Y la respuesta dada fue muy significativa:
"Porque
hablamos en vano, porque estamos satisfechos con las cosas de los
sentidos,
y porque estamos corriendo tras nuestros deseos; por lo tanto cubrimos,
por así decir, la Realidad con bruma." Aquí, la palabra
maya
no es empleada en absoluto, pero se nos da la idea de que la causa de
nuestra
ignorancia es una especie de bruma que ha venido a interponerse entre
nosotros
y la Verdad. Mucho más tarde, en uno de los últimos
Upanishads,
vemos reaparecer la palabra maya, pero en ese momento ya se
había
operado una transformación, y múltiples significados
nuevos
se habían agregado a ese término. Algunas teorías
habían sido propuestas y otras repetidas; algunas sólo
habían
sido esbozadas, hasta que, finalmente, la idea acerca de maya se
fijó.
En el Shvetáshvatara Upanishad leemos: "Sabe que la naturaleza
es
maya, y que el que gobierna esta maya es el Señor Mismo."
Pasando
a nuestros filósofos, vemos que el término maya ha sido
manipulado
por ellos en varias formas, hasta que llegamos al gran Shankaracharya.
Los budistas también han manejado un poco la teoría de
maya,
pero entre sus manos se ha vuelto muy semejante a lo que se llama
Idealismo,
y tal es el sentido que, en general, se da actualmente a esta palabra.
Cuando el hindú dice que el mundo es maya, inmediatamente la
gente
tiene la idea de que el mundo es una ilusión. Esta
interpretación
no deja de estar un poco justificada, puesto que proviene de los
filósofos
budistas, entre los que había un grupo que no creía,
absolutamente,
en el mundo exterior. Pero en el Vedanta tal como se desarrolló
finalmente, maya no es ni Idealismo, ni Realismo, ni es una
teoría.
Es una simple aserción de los hechos: lo que somos y lo que
vemos
a nuestro alrededor.
Luego está ese
hecho tremendo que es la muerte. El mundo entero va hacia la muerte;
todo
muere. Todo nuestro progreso, nuestras vanidades, nuestras reformas,
nuestros
lujos, nuestra riqueza, nuestro saber, todo tiene este único
desenlace:
la muerte. Es la única cosa cierta. Las ciudades aparecen y
desaparecen,
los imperios se levantan y caen, los planetas se rompen en pedazos y se
reducen a polvo, para ser diluidos en la atmósfera de otros
planetas.
Así ha ocurrido siempre desde un tiempo que no ha tenido
comienzo.
La muerte es el fin de todo. La muerte es el fin de la vida, de la
belleza,
de la riqueza, del poder y también de la virtud. Los santos
mueren,
y también los pecadores; mueren los reyes y los mendigos. Todos
van hacia la muerte, y sin embargo, existe un tremendo apego a la vida.
De alguna manera, no sabemos por qué, nos aferramos a la vida y
no podemos renunciar a ella. Y esto es maya.
Todos estamos buscando
el vellocino de oro; cada uno piensa que será suyo. Todo hombre
razonable ve que su chance es quizás una sobre veinte millones,
y sin embargo, todos luchan para conseguirlo. Y esto es maya.
La muerte está
al acecho de su presa noche y día en esta nuestra tierra y al
mismo
tiempo pensamos que vamos a vivir eternamente. Un día le
hicieron
esta pregunta al rey Yudhishthira : ¿Cuál es la cosa
más
maravillosa de esta tierra? Y el rey respondió:
Diariamente
vemos a la gente morir a nuestro alrededor, y sin embargo los hombres
creen
que no morirán jamás. Y esto es maya.
Maya es una
aserción
del hecho de este universo; de la forma cómo marcha.
Generalmente
la gente se asusta cuando se le dicen estas cosas. Pero nos hace falta
osadía. Ocultar los hechos no es el medio de hallarles
solución.
Como todos sabéis, una liebre perseguida por los perros oculta
su
cabeza y se cree a salvo; cuando nos precipitamos en el optimismo,
hacemos
exactamente como la liebre, pero esto no es un remedio. Hay objeciones
contra eso, pero notaréis que ellas vienen generalmente de la
gente
colmada con las cosas buenas de la vida. En este país
(Inglaterra),
es muy difícil volverse pesimista. De qué manera
admirable,
me dicen todos, con qué progresos, el mundo va adelante; pero,
lo
que cada uno es en sí mismo, es su propio mundo. Los animales
viven
a expensas de las plantas, los hombres a expensas de los animales, y,
lo
que es peor, a expensas unos de otros; el fuerte a expensas del
débil.
Esto pasa en todas partes. Esto es maya.
¿Qué
solución
veis? Cada día oímos muchas explicaciones, y se nos dice
que al final todo estará bien. Admitiendo que esto sea posible,
¿por qué esta manera satánica de hacer el bien?
¿Por
qué no se puede hacer el bien por medio del bien y no con estos
métodos infernales? Los descendientes de los seres humanos
actuales
serán dichosos, pero, ¿por qué tiene que haber,
ahora,
todo este sufrimiento? No hay solución.
Esto es maya.
Esta maya está
en todas partes; es terrible. Y sin embargo, a través de
ella
debemos trabajar. El hombre que dice: Yo trabajaré cuando el
mundo
se haya vuelto todo bueno, entonces gozaré de la felicidad,
tiene
tantas probabilidades de éxito como el que está sentado
al
borde del río Gangá y dice: Vadearé el río
cuando toda el agua se haya volcado en el océano. El camino no
es
seguir maya, sino ir contra ella. Este es otro hecho que debemos
aprender.
No hemos nacido para secundar a la naturaleza, sino para competir con
ella.
Somos los amos que ella debe servir, y somos quienes nos cubrimos de
cadenas.
¿Por qué está aquí esta casa? No es la
naturaleza
que la ha edificado. La naturaleza nos dice: Id a vivir al bosque.
El
hombre replica: voy a edificar una casa y a luchar contra la
naturaleza;
y esto es lo que hace. Toda la historia de la humanidad es una lucha
continua
contra las llamadas leyes de la naturaleza, y es el hombre quien
finalmente
vence. Pasando al mundo interior, también allí se libra
la
misma lucha, esa lucha entre el hombre animal y el hombre espiritual,
entre
la luz y las tinieblas, y allí también el hombre resulta
victorioso. Él desbroza su camino, por así decir, fuera
de
la naturaleza, hacia la libertad.
Así vemos que
los filósofos vedantistas encuentran, más allá de
esta maya, algo que no está ligado por ella, y si podemos llegar
hasta allá, no estaremos ligados a maya. Esta idea, bajo una u
otra
forma, es propiedad común de todas las religiones; pero para el
Vedanta no es más que el comienzo de la religión, y no su
término. La idea de un Dios Personal, Creador y Señor del
Universo, como se Le ha llamado, que gobierna esta maya, esta
naturaleza,
no es el punto final de este pensamiento vedántico, sino el
comienzo.
La idea se desarrolla más y más, hasta que el
vedantista
descubre que Aquel que creía lejos de él, no es otro que
él mismo, y en realidad, está en su interior. Él
es
quien es libre, pero que por limitación se creía ligado.
Los
mismos nervios que
conducen sensaciones de placer conducen también sensaciones de
dolor,
y la misma mente percibe dichas sensaciones. El progreso del mundo
significa
más diversiones, pero también más miseria. Esta
mezcla
de vida y muerte, de bien y mal, conocimiento e ignorancia, es lo que
llamamos
Maya o el fenómeno universal. Podéis permanecer
durante
toda la eternidad aprisionados dentro de esa red, buscando la
felicidad;
la hallaréis en abundancia, como asimismo la desdicha. El creer
que podemos conseguir lo bueno sin lo malo es ingenuidad infantil y
necia.
Sólo quedan dos caminos. Uno consiste en abandonar toda
esperanza
y aceptar al mundo tal cual es, soportando los golpes y las desdichas
con
la esperanza de recoger de vez en cuando unas migajas de felicidad. El
segundo camino consiste en abandonar la búsqueda del placer,
sabiendo
que éste es otro aspecto del dolor, y buscar la verdad; y
quienes
se atreven a indagar la verdad acaban por descubrir que está
siempre
presente – presente en ellos mismos –. Cada alma es
potencialmente divina. La meta es manifestar esta
divinidad
que llevamos dentro, controlando la naturaleza externa e interna. Las
doctrinas,
dogmas, rituales, libros, templos o formas,
sólo son detalles secundarios.
Krishnamurti responde:
Pregunta:
¿Cómo sabemos que hay un mundo exterior? ¿Cómo sabemos que hay una
esencia de lo que es el mundo exterior?
Tal vez el mundo exterior sea
"maya".
Respuesta:
Bueno, creo que la palabra «maya» significa en
sánscrito «medir». Mientras la mente tenga la capacidad de medir,
creará ilusión, naturalmente. Se ha dicho, pues, que, como la mente no
tiene otra capacidad que la de medir, por eso lo que mide es ilusorio.
Esta es una filosofía que existe en la India: la de que todo el mundo
es «maya», que es una ilusión. Dicen, pues, que se aguante, que se
olvide la propia enfermedad, los daños, el mundo, las disputas..., que
son simplemente una ilusión. Pero en realidad, el decirle a un hombre
hambriento que el mundo es «maya», ilusión, no significa nada en
absoluto para él. Si una persona tiene cáncer, dolor, el hablarle de
ilusión no significa absolutamente nada. Lo que importa no si el mundo
existe o no, si es ilusorio o no, sino hecho es que ahí está el mundo,
ahí estamos Vd. yo, en pugna uno con otro, los vietnamitas caen muertos
por éste y por aquél. Estos son hechos y, para comprender los hechos,
debemos estar en contacto con ellos, lo que significa mirarlos sin
ninguna interferencia del pensamiento, como prejuicio, dogma, creencia,
nacionalidad.
El Dr. Serge Raynaud de la
Ferriere (1916-1962) manifestó:
Llegamos, pues, a
comprender que nuestro pensamiento juzga
según las apariencias y nos atamos a cosas que de hecho son
ilusorias, inexistentes en hecho. Es el espejismo, la ilusión,
base de la doctrina del "MAYA". El principio del Maya no se limita
solamente a la filosofía sino a la física misma; la
materia es no-existente, salvo como fenómeno, en tanto que es
manifestación de la energía primordial, constituyendo el
electrón donde el manantial último es el
Espíritu. La materia como todas las cosas aparentes, es
ilusoria. Las Doctrinas Secretas han establecido este concepto desde
hace mucho tiempo, que nuestra ciencia empieza felizmente a concebir.
Los Archivos Esotéricos de Oriente contienen numerosa
documentación sobre estos puntos, en que el Universo externo es
un compuesto psíquico- físico del espíritu y en
que la materia, tal como nosotros la vemos, es una
cristalización de la energía mental y en consecuencia: el
producto del pensamiento. Es ahora que la Ciencia occidental ha
alcanzado la idea acerca de la realidad de los Sabios de Oriente.
De la Sagrada Enseñanza expuesta por Taimni
El
profesor I. K. Taimni, nació y murió en la India en el
siglo XX, fue por muchos
años profesor de Química en la Universidad de Allahabad.
Su vida la dedicó a exponer con rigor científico las
verdades del campo del espíritu
contenidas en los tratados propios de la tradición védica
que aludieran
a las exploraciones de la esfera del alma. Sobre Maya, nuestro tema central, lo vedanta lo enseñó con visión moderna manifestando:
Según
las más elevadas concepciones de la filosofía hindú, el universo
manifestado nos es sino producto da la Ideación Divina, y el mundo
individual de las almas el resultado del impacto de esta Ideación
Divina sobre las mentes individuales.
El hombre moderno se inclina
generalmente a pensar que los hechos no son hechos hasta que no llevan
el sello de la aprobación científica. Es una ironía del destino que la
Ciencia, que ha establecido los fundamentos del materialismo, ha
proporcionado también aquellos hechos que han demolido realmente al
materialismo científico.
Si
el universo físico carece de una base material o substancial, si
está basado solamente en ondas y nada más que en ondas,
de acuerdo con la física moderna ¿cómo es que
vemos este maravilloso mundo de formas, colores, sonidos, etc., que nos
rodea? La Ciencia no tiene respuesta a este interrogante, porque no
reconoce la existencia de los mundos más sutiles de la mente y
la conciencia ocultos detrás del mundo físico de
átomos, moléculas y ondas. El hecho de que la Ciencia no
tenga respuesta a esta muy pertinente cuestión, y lo que es
más asombroso, que no esté interesada en ello, demuestra
cuán totalmente ininteligente, estrecha y unilateral es su
acercamiento al problema de la vida.
Todos pensamos y sentimos que estamos
viviendo en un mundo de objetos reales tangibles, tocándolos,
viéndolos, oliéndolos, etc., directamente. Sin embargo,
no necesitaremos entrar en ninguna indagación filosófica
sutil ni en ningún análisis psicológico para
convencernos de que realmente estamos viviendo en un mundo mental que
reside en nuestra propia mente y que los objetos que tocamos, vemos y
olemos son solamente nuestras imágenes mentales que hemos
proyectado al exterior por acción de algún proceso mental.
La ilusión compenetra nuestra
vida y el hecho de que no seamos conscientes de ello no significa que
la ilusión no exista. El universo en el que vivimos es una
expresión o corporización de la Consciencia Divina cuando
lo "vemos" desde el Centro de nuestro ser; pero no lo vemos como una
corporización de la Divinidad o una modificación de la
Consciencia Pura. Lo vemos como un vasto, desconocido y hostil medio
ambiente en el que estamos luchando por nuestra existencia individual.
En esto consiste la ilusión fundamental llamada Maya y que es responsable de nuestro encadenamiento al mundo manifestado.
Como el universo está basado en
la verdad y en la justicia, el fracaso de lo falso e injusto es
inherente a la naturaleza misma de las cosas y es causado por la
Naturaleza a su debido tiempo.
*
Personal visión de lo Revelado
La
Liberación no es el Fin como muchos equivocadamente han
supuesto,
al fundirnos en la Realidad Una (que es DIOS) no
desaparecemos,
luego de ganar el Divino Potencial se reaparece en una
Realidad Superior.
I: K: Taimni
A manera de síntesis de
la tesis que sustento desde que tengo memoria y que el pasar de los
años fue consolidado, puedo afirmar:
Antes que tu cerebro fuera, tu mente ya lo era. Tu cerebro es gracias a tu mente.
Antes que tu mente fuera, tu alma ya lo era. La mente humana lo es gracias al alma.
Antes que tu alma fuera, tu espíritu ya lo era. El alma lo es gracias al espíritu.
Te preguntas:
¿Qué hay más allá del espíritu?
Más
allá podrás encontrarte cara a cara con DIOS y se
borrará de tu mente lo ilusorio de los universos.
¿Cómo?
No
recuerdas quién eres. Cada uno es un espíritu individual.
Hace eones de tiempo tú y millardos más emergieron desde
DIOS cual espíritus increados. Lo hiciste como un ente
infinitamente pequeño y dotado de infinitos atributos
potenciales a desarrollar, vida a vida, en los planos dimensionales, un
resultado de la Ideación mental de un Pensamiento de DIOS.
Comenzamos el largo caminar desde abajo, de lo más denso
ascendiendo hacia lo más sutil. Superada la etapa de un plano
dimensional se asciende el inmediatamente superior. Al manifestar todos
los atributos de tu espíritu serás infinitamente grande
en la séptima dimensión. Entonces verás cara a
cara a DIOS y
retornarás a ÉL.
¿Todo termina allí?
Calma,
ten paciencia, nos queda mucho por delante. Retornados a DIOS
adquirirás nuevas potencialidades para, en tu individualidad que
jamás perderás, volver a emerger desde DIOS, esta
vez no como espíritu sino cual Logos supraespiritual.
¿Cuándo será eso?
Por
analogía entendamos que estamos cursando el nivel básico
escolar y no nos encontramos capacitados para recibir ni entender la
Enseñanza del grado universitario y académico superior.
En nuestro nivel ni en ninguno superior previo al retorno, veremos cara
a cara a DIOS. Al llegar a ser un espíritu plenamente
desarrollado sí lo verás.
Ten
paciencia impaciente Amigo lector, no preguntes más, no olvides
que se hace camino al andar y, aunque no lo creas, bastante hemos
andado y seguimos caminando.
*
La materia y la Física moderna
Del vacío surge tu sueño, mediante el poder de la clara
intención, mediante la sabiduría de la ecuanimidad y de la compasión,
por la acción correcta que construye y lleva las cosas a una conclusión
clara. Estos tres fuegos constructores están dentro de cada uno de
nosotros, como espirales de energía en movimiento constante, en un
constante dar a luz de los frutos de nuestro deseo e intención.
Dhyani Ywahoo
Ojalá la fantasía contribuya a estimularnos
a cada
uno de nosotros,
ya que el hombre es la única criatura dotada de imaginación
y capaz
de concebir lo que
no existe. Su pensamiento puede conquistar el tiempo y el espacio,
crear lo que jamás
hubo y hacer avanzar las fronteras de la ciencia. Porque no puede
haber ciencia sin
ficción.
Alexander
Kazantsev
La física
cuántica con la física moderna en general y la
física teórica en especial nos ayudan a entender el abstracto
concepto de Maya o lo ilusorio de la Vida. Aportan tesis que pulverizan
al materialismo ayudando a desplegar las alas del
mento-espiritualismo transpersonal.
El premio Nobel de física Max Planck (1858-1947), señaló:
La materia
concreta es mera apariencia. La materia no existe,
nace y permanece unida gracias a una Fuerza que activa las partículas
haciéndolas vibrar. Se debe admitir que detrás de esa Fuerza
está la presencia de un Espíritu consciente e inteligente,
el cual es el fundamento esencial de todo.
Ahora bien: como a su vez los seres espirituales
no pueden ser por sí mismos, sino que deben ser creados, no vacilo
en denominar a ese misterioso Creador como lo han nombrado todos los pueblos
cultos de la Tierra en los pasados milenios: Dios. El átomo abre a la humanidad la
puerta a un
mundo perdido y olvidado del espíritu.
La ciencia nunca se halla en situación
de explicar en forma concluyente y decisiva los problemas con que tiene
que enfrentarse.
La investigación
científica nos proporciona los detalles de los fenómenos, más la comprensión de
estos es esencialmente metafísica.
No podemos penetrar científicamente en el mundo del espíritu, para
ello deberíamos traspasar el umbral del ego individual en el cual las
leyes y aun los sistemas científicos no tienen cabida ni la tendrán
nunca.
Para el Nobel de física Erwin Schrödinger (1887-1961):
Lo que construimos en nuestras mentes no puede tener (así lo
siento) un poder dictatorial sobre nuestra mente, no puede cuestionarla
ni aniquilarla. Algunos de ustedes dirán, estoy seguro, que esto es
misticismo. Así, aun reconociendo que las teorías de la física son
siempre relativas –por cuanto dependen de ciertas hipótesis básicas-,
podemos afirmar, o así lo creo, que las teorías actuales de la física
sugieren fuertemente la indestructibilidad de la Mente frente al
tiempo.
John Archibald Wheeler, destacado físico teórico dice:
El Universo está formado por innumerables “geones” constituyendo la
estructura de base del “espacio-tiempo”. El Universo de los “geones”
estaría literalmente perforado por millares de agujeros minúsculos,
especie de cavidades, dando acceso a un “superespacio” polidimensional
que forma la base esencial del Universo que nos es familiar. El
Universo entero del espacio-tiempo estaría conectado en todas sus
partes a este “superespacio” por estos millares de agujeros.
Se lo quiera o
no, la mente es un factor participando directamente en la
representación que queremos proponer del universo.
El físico teórico Amit Goswami propone:
El
mundo material
alrededor nuestro, las sillas, las mesas, el cuarto, la alfombra,
incluyendo la cámara, no son mas que movimientos de la
conciencia. Yo voy escogiendo momento a momento entre cada uno de esos
movimientos para que mi conciencia se manifieste.
La CONCIENCIA es creadora de la realidad
física, ya que algo solo existe en el plano material si fue creado
primeramente en otros planos. La conciencia es la base de todo ser.
El paradigma o visión actual del mundo es fruto del pasado y válido
sólo para el pasado; se necesitan nuevas vías para abordar el presente
en constante desarrollo, por no hablar del futuro.
La nueva ciencia dice que la parte material del mundo
existe... pero no es la única parte de la realidad. (La visión
completa), la integración de lo espiritual y de lo científico, fue muy
importante para mí…ya que descubrí la nueva forma de hacer ciencia
cuando descubrí el espíritu. Es espíritu era la base natural de mi ser.
El mundo material de la física cuántica es sólo una posibilidad. Es por
medio de la conversión de posibilidad en realidad que la consciencia
crea el mundo manifiesto… El universo es auto-consciente pero sólo a
través nuestro... (con seres humanos conscientes) existe la posibilidad
de creatividad manifiesta...una vez que reconocí que la consciencia era
la base del ser, en meses todos los problemas
de la teoría de medición cuántica, las paradojas de medición
simplemente se desvanecieron. El resultado neto fue la
creatividad…desde entonces he sido bendecido con idea tras idea, y
muchos de los problemas se resolvieron- el problema de la cognición, de
la percepción, la evolución biológica, sanación mente-cuerpo.
.
El pensador chileno Humberto Maturana sostiene que:
No hay nada afuera de nuestra mente. Yo digo que no hay nada, porque en el momento en que diga que "hay
algo, ese algo ya no es. Ese algo está configurado por lo que yo
hago... no tiene sentido ni siquiera la pregunta acerca de qué
hay. No hay manera de conocer el "afuera" sin contaminarlo con nuestra
observación. Lo que estoy diciendo es que lo real es un
argumento explicativo. Cada vez que uno habla de lo real, lo que
está haciendo es inventar un argumento para explicar la
experiencia. Pero lo que uno explica es la experiencia, y no lo "real".
Uno inventa nociones explicativas: la noción de realidad, la
noción de tiempo, de energía, de materia. No son cosas
sino coherencias de la experiencia. Yo estudiaba la visión de
colores como un fenómeno de captación del mundo externo.
Me encontré con limitaciones tecnológicas. Durante un
tiempo pensé que necesitaba un buen sistema de
computación, programas, etc. Hasta que un día
pensé que a lo mejor las cosas no suceden como yo creía y
que lo que tengo que hacer es no ver cómo el sistema nervioso me
capta la información sino cómo genera las coherencias que
hacen que yo les de el mismo nombre a distintas circunstancias.
Cambié el planteo y cambió el problema.
El físico atómico Robert
Frish señaló:
En
la base de la física clásica está la
suposición
ingenua de que el mundo existe "fuera de nosotros", y que nuestros
sentidos
nos permiten observar el mundo tal como es realmente. Desde hace mucho
tiempo, los filósofos habían puesto reparo a aquel punto
de vista primitivo, indicando que es imposible saber si una flor es
realmente
roja cuando nadie la mira o, es más, si realmente existe.
La teoría cuántica nos enseñó que cualquier
intento de explorar una cosa tiene irremediablemente en efecto sobre la
misma. Hablando con precisión, la teoría cuántica
vació de sentido frases como esto es así, y todo
lo
que podemos decir es: Hemos observado esto. Cuando observamos
la
velocidad de una partícula, cambiamos su posición, y
viceversa;
de manera que nuestro conocimiento simultáneo de ambas
magnitudes
implica un grado de indeterminación, descrito por la
relación
de incertidumbre de Heisenberg. Por eso, no podemos predecir con
precisión
el movimiento futuro de la partícula.
Hablando en términos muy generales, la mecánica
cuántica
nos permite predecir, a partir de las observaciones realizadas, no la
certeza,
sino tan sólo la probabilidad de que la próxima
observación
dará un resultado determinado. La causalidad en sentido estricto
ya no forma parte de la física atómica y
subatómica.
El libre albedrío es bastante diferente. No significa que
nuestras
acciones sean impredecibles. Quiere decir que reaccionamos a los
estímulos
de una manera compleja y sutil, la cual depende de nuestra
composición
genética, de la educación recibida y de todas las
múltiples
experiencias de la vida. Esto es posible sólo porque nuestro
cerebro
es un sistema muy seguro, que trabaja de manera casi totalmente
determinista;
en verdad, el cerebro fue construido muy cuidadosamente para hacer
mínimas
las incertidumbres que resultan de fluctuaciones cuánticas.
Sin embargo, es probable que los efectos cuánticos den lugar a
una
cierta acción errática ocasional que nos evita ser
máquinas;
es posible que causen el pensamiento extraño que, en su fugaz
paso
por nuestra mente, sea la semilla de un poema, de un cuadro o de una
nueva
teoría científica. Por lo tanto, la incertidumbre
cuántica
muy bien podría ser la fuente de la creatividad humana, y aun de
la libertad humana. Podemos añadir que los efectos
cuánticos
son la causa principal de las mutaciones, y por lo tanto hacen posible
el proceso de la evolución biológica.
Para Bertrand Russell (1872-1970):
Cuando usted
cree
tocar una cosa, existen ciertos electrones y protones que forman parte
de su
cuerpo y que son atraídos y repelidos por ciertos electrones y
protones de la
cosa que usted cree estar tocando, pero no existe contacto verdadero. La materia se ha convertido
en algo demasiado fantasmal para
que se lo
pueda utilizar como bastón adecuado para golpear la mente. La
materia en
movimiento, que solía parecer tan incuestionable, resulta ser un
concepto
completamente inadecuado para las necesidades de la física.
Fritjof
Capra afirma:
El hecho de que el mundo vivo se halle organizado en estructuras de
muchos niveles, significa que también existen niveles de mente.
En el organismo humano, por ejemplo, ocurren diversos niveles de
mentación "metabólica" en células, tejidos y
órganos, y la mentación neurológica ocurre en el
cerebro, la cual consiste de múltiples niveles que corresponden
a diferentes etapas de la evolución humana. La totalidad de
estas mentaciones constituye lo que yo llamaría la mente o
psique humana. En el orden estratificado de la naturaleza, las mentes
humanas individuales se encuentran insertas en las mentes más
amplias de sistemas sociales y ecológicos, y éstos se
hallan integrados al sistema mental planetario que, a su vez, debe
participar en algún tipo de mente universal o cósmica.
Es obvio que esta noción de mente se acerca mucho a aquellas de
las tradiciones espirituales. El concepto de orden estratificado juega
un rol sobresaliente en muchas tradiciones. En la ciencia moderna,
equivale a la noción de múltiples niveles de realidad que
difieren en su complejidad y son mutuamente 'interactuantes' e
interdependientes. Estos incluyen niveles de mente que se conciben como
diferentes manifestaciones de la conciencia cósmica.
No es sorprendente que la nueva visión de la realidad se acerque
mucho a las visiones de los místicos de todos los tiempos y
tradiciones, y en especial, a las visiones sostenidas en las
tradiciones espirituales de la India. Hace diez años me
asombré al hallar las similitudes más increíbles
entre la física moderna y el misticismo oriental. Ahora estas
semejanzas se pueden extender con igual validez a la biología,
la psicología y otras ciencias. Hoy podemos afirmar, con
considerable seguridad, que la sabiduría antigua de Oriente
resulta ser el fundamento filosófico más compatible con
nuestras teorías científicas modernas.
Permítanme iniciar el análisis de la nueva
concepción de la realidad exponiendo la visión de la
materia que ha surgido de la física moderna. Según la
física contemporánea, el mundo material no es un sistema
mecánico formado por objetos separados, sino más bien
aparece como una compleja red de relaciones. Las partículas
subatómicas no pueden ser concebidas como entidades separadas y
aisladas, sino que se las debe percibir como interconexiones o
correlaciones en una red de eventos. El concepto de objetos separados
es una idealización que puede ser útil, pero que no tiene
ninguna validez fundamental. En palabras de Werner Heisenberg, uno de
los fundadores de la teoría cuántica: "Es así que el mundo aparece como un complejo tejido de sucesos
donde se alternan, sobreponen o combinan conexiones de diversos tipos,
determinando así la textura del todo". Esta es, con bastante exactitud, la forma en que los místicos
orientales vivencian el mundo. Tomemos, por ejemplo, las siguientes
palabras de Sri Aurobindo:
"El objeto material se transforma... en algo diferente de lo que ahora
vemos, no un objeto separado de un fondo o rodeado del resto de la
naturaleza, sino una parte indivisible, e incluso en forma sutil, una
expresión de la unidad de todo lo que vemos".
A modo de otro ejemplo, permítanme citar al físico
atómico Henry Stapp: "Una partícula elemental no es una entidad no analizable con
existencia independiente. En esencia, es un conjunto de relaciones que
se extienden a otras cosas".
Comparen esto con Nagarjuna, fundador de la escuela budista madhyamika:
"Las cosas obtienen su ser y naturaleza por dependencia mutua: por
sí solas, no son nada".
Los físicos y místicos concuerdan en que lo que llamamos
"objetos" son, en realidad, patrones en un proceso cósmico
inseparable, y también concuerdan en que estos patrones son
intrínsecamente dinámicos. En la física
subatómica, la masa ya no se asocia con una sustancia material,
sino que se reconoce como una forma de energía. Sin embargo, la
energía se asocia con actividad, con procesos; es una medida de
actividad. Las partículas subatómicas son patrones
dinámicos, procesos más que objetos. En forma similar, lo
que llamamos "cosa" ha sido descrito por místicos indios con la
palabra sánscrita samskara, término que significa antes
que nada "un evento" o "un suceso", y sólo en forma secundaria,
"una cosa existente". Tal como explica el erudito budista D.T. Suzuki:
"Los budistas conciben a un objeto como un evento y no como una cosa o
sustancia".
Los patrones energéticos del mundo subatómico forman
estructuras atómicas y moleculares estables que conforman la
materia y le dan su sólida apariencia macroscópica,
haciéndonos creer así que está hecha de alguna
sustancia material. La idea de una sustancia es bastante útil a
nivel macroscópico, pero a nivel atómico ya dejó
de tener sentido. Los átomos constan de partículas y
éstas no se componen de ninguna sustancia material. A1
observarlas, nunca se ve sustancia alguna; lo que vemos son patrones
dinámicos que cambian continuamente de uno en otro una danza
continua de energía.
La visión mística de la conciencia se basa en la
experiencia de la realidad en "estados alterados de conciencia", los
que tradicionalmente se logran mediante la meditación. Los
psicólogos han llegado a llamar "transpersonales" a las
experiencias excepcionales de este tipo, porque parecen permitir que la
mente individual se contacte con patrones mentales colectivos e incluso
cósmicos. El interés de la psicología
transpersonal se centra en el reconocimiento, comprensión y
vivencia de los estados alterados de conciencia y en las condiciones
sicológicas que representan obstáculos a tales
comprensiones transpersonales. Por lo tanto, sus intereses son muy
similares a aquellos de las tradiciones espirituales, y de hecho,
algunos sicólogos transpersonales se hallan trabajando en
sistemas conceptuales que pretenden acercar e integrar la
psicología y la búsqueda espiritual.
Según numerosos testimonios, las experiencias transpersonales
incluyen una relación con la realidad intensa, personal y
consciente que va mucho más allá del actual marco de
referencia científico. Por lo tanto, no debiéramos
esperar que la ciencia, en su estado actual, confirmara o contradijera
la visión mística de la conciencia. Sin embargo, el
enfoque sistémico de la mente parece perfectamente consecuente
con las visiones científica y mística de la conciencia, y
por lo tanto, proporciona el marco de referencia ideal para unificar a
ambas.
La palabra maya, uno
de los términos más importantes en la filosofía
hindú,
ha cambiado de significado a través de los siglos. Desde "poder"
o "fuerza" del divino actor o mago, se
transformó en el estado psicológico de cualquier
persona
bajo el hechizo de la obra teatral mágica. Mientras confundamos
la infinidad de formas de la divina lila con la realidad, sin percibir
la unidad de Brahman dentro de todas estas formas, estamos bajo el
hechizo
de maya. Por lo tanto, maya, no significa que el mundo es una
ilusión,
como equivocadamente se dice. La ilusión meramente se encuentra
en nuestro punto de vista, si pensamos que las formas y estructuras,
cosas
y eventos, que nos rodean son realidades de la naturaleza, en vez de
darnos
cuenta de que ellos son conceptos creados por nuestras mentes
empeñadas
en medir y categorizar. Maya es la ilusión de tomar estos
conceptos
por realidades, de confundir el mapa con el territorio.
En la visión
hindú
de la naturaleza, por lo tanto, todas las formas son relativas,
fluidas,
el siempre cambiante maya, conjurado por el gran mago de la divina obra
teatral. El mundo de maya cambia continuamente pues el divino lila es
una
obra rítmica y dinámica. La fuerza dinámica de la
obra es karma, otro concepto importante del pensamiento hindú.
Karma
significa "acción". Es un principio activo de la obra, la
acción
total del universo, donde todo está dinámicamente
conectado
con todo el resto. Karma es la fuerza de la creación, de la cual
todas las formas obtienen su vida.
El significado de karma,
como el de maya, ha sido bajada desde su nivel cósmico original
al nivel humano, donde ha adquirido un sentido psicológico.
Mientras
nuestra visión del mundo sea fragmentada, mientras estemos bajo
el conjuro de maya y pensamos que estamos separados de nuestro ambiente
y que podemos actuar independientemente, estamos atados por karma.
Liberarse
de las ataduras de karma significa darse cuenta de la unidad y
armonía
de toda la naturaleza, incluyendo al humano, y actuar de acuerdo a
esto.
Toda acción sucede en el tiempo por la interrelación de
las
fuerzas de la naturaleza, pero el hombre perdido en su engaño
egoísta
piensa que él mismo es el actor. Pero el hombre que conoce la
relación
entre las fuerzas de la naturaleza y acciones, ve como algunas fuerzas
de la naturaleza trabajan sobre otras fuerzas de la naturaleza, y por
ello
deja de ser su esclavo.
Liberarse del conjuro
de maya, romper las ataduras de karma, significa darse cuenta de que
todo
fenómeno que percibimos con nuestros sentidos son parte de la
misma
realidad. Significa experimentar, completamente y personalmente, que
todo,
incluyéndose uno mismo, es Brahman. Esta experiencia es llamada
moksha, o "liberación" en la filosofía hindú y es
la esencia misma del hinduismo.
La mente occidental se
confunde fácilmente con el número fabuloso de dioses y
diosas
que pueblan la mitología hindú en sus variadas
apariciones
y encarnaciones. Para entender como los hindúes pueden
desenvolverse
entre esta multitud de deidades, debemos entender la actitud
básica
del hinduismo de que en la sustancia todas estas divinidades son
idénticas.
Son todas manifestaciones de la misma realidad divina, reflejan
diferentes
aspectos del infinito, omnipresente y - finalmente - incomprensible
Brahman.
El zen y el físico. Entrevista a Fritjof Capra por Guitta Pessis-Pasternak
"En la historia del pensamiento humano, los
desarrollos más fecundos nacen en la intersección de dos corrientes de
ideas"; esta máxima de Werner Heinsenberg parece estar perfectamente
ilustrada por el estudio comparado entre la unicidad de la materia en física
contemporánea y la visión unitaria de las filosofías orientales, conducido
por el físico vanguardista Fritjof Capra
Según la física actual el cosmos no es un universo
mecanicista compuesto de una multitud de partículas independientes, sino un
conjunto dinámico de acontecimientos interconectados en el cual únicamente las
interacciones determinan la estructura de la realidad. Este universo de procesos
y energía evoca ciertas nociones de las tradiciones espirituales, muy
particularmente aquéllas del budismo que permiten una comprensión más
inmediata de los nuevos conceptos de espacio - tiempo - materia. Fritjof Capra
compara, así, el flujo incesante de la materia con la danza cósmica de Shiva,
para quien todos los elementos del mundo creación y destrucción permanente de
materia son maya: no fundamentales, sino ilusorios y cambiantes. Algunas de las
obras que este pensador contemporáneo ha escrito, conocidas en nuestro país,
son: El Tao de la física, El punto crucial...
¿Por qué el Occidente concebía una filosofía
dualista, mientras que el Oriente fundaba una espiritualidad monista?
Se puede hoy imaginar el desarrollo de la conciencia, su
"cómo", pero no su "por qué". Esta evolución de la mente
humana, que debió tener lugar algunos millones de años antes de nuestra era,
se sitúa simultáneamente en Occidente y Oriente. Por razones misteriosas nos
hemos identificado, en Occidente, con la mente racional que analiza y separa,
que es la expresión del ego estrecho, opuesto al pensamiento intuitivo y sintético,
mientras que en Oriente se han abocado a trascenderlo. Los grandes místicos han
existido tanto en el Oeste como en el Este. Pero es en Oriente que esta
corriente ha encontrado un terreno más propicio.
¿Entonces seria válido creer, junto con el célebre
pensador japonés Yukawa, que podría existir una correlación entre la
importante contribución de Japón a la física moderna y la filosofía zen,
budista?
Los físicos orientales, acerca de quienes subrayé este
paralelismo, me han confesado no haber pensado en esto, pues se encontraban
condicionados por la ciencia y la cultura
occidental, al punto que ya no podían instaurar una correlación entre estas
dos visiones del mundo. Es solamente en su madurez que pudieron establecer--tal
como Yukawa--este vínculo. Es bastante probable, no obstante, que guardaran en
su inconsciente colectivo la impronta de la filosofía oriental, que les permitía
asir mejor los nuevos conceptos de la física atómica.
¿Los principios de unidad e interdependencia de los fenómenos
serían propios a la espiritualidad oriental, así como a la microfísica?
En otro tiempo, según la teoría newtoniana, el espacio
tridimensional del universo era el teatro de los fenómenos físicos, compuestos
de partículas elementales qué interactuaban y se separaban independientemente.
Mientras tanto, uno de los descubrimientos mayores de la física contemporánea
fue darse cuenta qué no existían entidades físicas independientes, qué la
realidad era un conjunto de correlaciones, un tejido de acontecimientos
interconectados, una interfase entre el observador y lo observado. Es uno de
estos tipos específicos de correlación qué llamamos "partícula";
esto no es más un grano de arena o una bola de billar, sino una trasferencia
permanente de energía e información.
¿De qué manera esta nueva concepción de la materia
puede evocar algunas nociones de la filosofía oriental?
Creo poder ilustrarlo con un cuento taoísta del pensador
Chuangtzu. Un día promete a sus discípulos darles a conocer el secreto último
del universo. Y les dice: "No hay cosas, he aquí la naturaleza fundamental
de la realidad". Tal es la base filosófica del taoísmo, el budismo y
otras tradiciones místicas. La mayor diferencia qué existe entre la actitud
científica y la tradición mística reside en el hecho de qué, en tanto científico,
diría qué un objeto es una noción aproximativa muy útil en la vida
cotidiana, pero, fundamentalmente, el objeto no existe, es únicamente una
"idealización", mientras el místico oriental pensaría qué es una
"ilusión", para él todos los fenómenos son interdependientes,
manifestación de una sola e igual realidad fundamental.
¿Cree qué esta realidad última pueda ser una energía?
Lo dudo. Por otra parte, la realidad última no puede ser
expresada por las palabras: trasciende nuestras concepciones intelectuales y,
según los místicos, puede ser vivida, pero no contada; mientras qué la
ciencia, al tratar de describir sus experiencias, no puede más qué tener
acceso al dominio racional qué es, en sí mismo, restringido y aproximativo.
¿La tradición mística no buscaría trasmitir su
mensaje?
La diferencia esencial entre un científico y un maestro místico
consiste en qué este último no está particularmente interesado en explicar
los fenómenos: busca, más bien, qué su discípulo pruebe la realidad
fundamental poniendo el acento en la iniciación más qué en la experiencia;
mientras el científico busca ante todo analizarla y describirla.
¿De qué manera la teoría cuántica seria apta para
revelar, a la manera de las filosofías orientales, la unidad fundamental del
universo?
Constatamos qué esta unidad e interdependencia recorren la física
moderna, cualquiera qué sea la teoría el modelo utilizado, comprendida la cuántica
o la relatividad. Einstein había construido esta última concibiendo la acción
de los campos en términos de modificación de estructuras de espacio y tiempo y
pensaba poder alterarlas, por más tiempo, con el fin de incluir otras
interacciones, pero fracasa. Desde entonces, otros pensadores han logrado
asociar la teoría de la relatividad con aquélla de la mecánica cuántica con
el propósito de desembocar en la teoría cuántica de los campos. Esta nueva
concepción evoca las imágenes de la tradición oriental; el campo cuántico
podría condensarse en materia, y una partícula qué forme parte de éste,
particularmente denso, evocaría una "ola emergiendo del océano", metáfora
clásica de la tradición oriental.
Heráclito pensaba ya qué todos los cambios en el
universo provenían de la interacción de los contrarios, lo qué subraya, por
tanto, la complementariedad. ¿Por qué el pensamiento occidental tomó 2 500 años
para redescubrir esta verdad?
El espíritu racional tiende a ver la realidad de manera estática,
incapaz de reconciliar los "contrarios", mientras qué el pensamiento
dinámico parece más apto para unificarlos. Las filosofías qué dan
preeminencia a la realidad dinámica, como aquéllas de Heráclito o del Tao, señalan
así la unidad de los contrarios: el yin y el yang no son más qué uno. En
Occidente, algunos filósofos, como Hegel con su dialéctica tesis antítesis -
síntesis, han compartido esta visión del mundo. Esa óptica dinámica resurge
hoy en las ciencias, particularmente en física. Niels Bohr había ya unificado
la onda y la partícula en su "ley de complementariedad". Y
actualmente la nueva de las "estructuras disipativas", introducida por
Ilya Prigogine, así como la teoría de sistemas señalan
qué la comprensión de la vida, en todos sus niveles, procede de esta unificación
de los contrarios.
Por tanto, dos concepciones opuestas subsisten, aquélla
de Albert Einstein: "lo real existe", y la de Niels Bohr: "todo
juicio de existencia es abusivo". ¿A quién le dará los hechos la razón?
Éste fue, en efecto, un debate histórico qué tuvo lugar
entre Bohr y Einstein. Este último creía en la existencia objetiva de la
realidad, posición qué le había impedido asumir las últimas consecuencias de
la mecánica cuántica, de la cual era uno de sus fundadores. Si él fue incapaz
de aceptar las interpretaciones "vanguardistas" de Heinsenberg y Bohr;
la causa esencial provenía de su carácter fundamentalmente determinista, porqué
había fundado su visión--una realidad objetiva compuesta de pequeñas partículas
separadas-- sobre aquélla de Descartes.
¿Diría que Einstein fue un profeta que no supo asumir
sus propias profecías?
De cierta manera sí. Por otro lado, estoy fascinado de ver cómo
Descartes es más fundamental que Newton, y ésa es la razón por la cual
Einstein pudo ir más allá que éste, sin pasar por aquél. El único capaz fue
Niels Bohr; el más próximo a un místico que a un científico puede hacerlo.
¿Sería la filosofía china quien lo inspiró?
Estaba tan impresionado por el principio de complementariedad
china, que incluso adoptó cómo su blasón el símbolo del yin y el yang.
¿Lo habría estado también por la complementariedad
entre la "estabilidad" y el "cambió "?
En efecto, porque usted puede tener una "estabilidad dinámica"
que implicaría las "fluctuaciones". Por otro lado, tal estabilidad
fue recogida por Heráclito y los taoístas con su visión de un mundo en
perpetuo movimiento, en proceso de cambio teniendo, no obstante, una cierta
permanencia. Es una cosmología de la autorregulación, de la autoorganización,
análoga a la estabilidad concebida por Prigogine en su concepción del
"orden de fluctuaciones".
Justamente, ¿estos descubrimientos recientes no podrían
restablecer el fundamento que la revolución científica de inicios de siglo había
estremecido tanto?
Asistimos, en efecto, a la emergencia de nuevas teorías, ya
sea que se trate de las "estructuras disipativas" de Ilya Prigogine,
de la "autoorganización" de Von Foerster o del "azar
organizador" de Henri Atlan. Estos son los elementos complementarios de un
rompecabezas complejo que está progresivamente a punto de constituir este nuevo
fundamento investigado por Einstein. Se trata de una visión holística, sistémica
y dinámica que se aplica a una extensa gama de fenómenos y campos científicos.
No sólo es en la física donde observamos actualmente lo que podemos llamar una
revolución dramática del pensamiento científico.
¿Por qué considera esta revolución cómo "dramática"?
Lo es intelectualmente, pues, cuando Niels Bohr y Werner
Heinsenberg, durante los años veinte, debieron modificar radicalmente sus ideas
y conceptos cayeron en un estado de crisis profunda--intelectual, existencial e
incluso emocional. Creo que hoy vivimos una situación análoga.
Ante esto, ¿asistiremos a la emergencia de un nuevo
paradigma?
Así lo creo, y lo llamaría el "paradigma ecológico",
pues la ecología incide en la interdependencia fundamental de todos los fenómenos
y aun sobre la naturaleza intrínsecamente dinámica del universo.
¿Se podría suponer que el coloquio Desorden/orden,
que reunió a eminentes pensadores, marcó una "bifurcación" en
la investigación científica?
Me gusta mucho esta pregunta porque mi último libro, The
turning point, trata, precisamente, de la importante
"bifurcación" que tiene lugar actualmente en el terreno científico,
que señala el paso de la visión universalista mecanicista de Descartes y
Newton a la holística y dinámica de Prigogine.
Así, usted parece estar atraído por la concepción dinámica
del budismo, que sostiene lo innecesario de ligar a las formas fijas objetos,
personas, ideas... sino aceptar un mundo en movimiento y cambiante...
Es la razón principal de mi atracción por los filósofos
orientales, y particularmente por el budismo, pues siempre he considerado el
aspecto móvil del universo cómo esencial. Incluso su terminología,
desprendida de connotaciones dinámicas: el término physis, por ejemplo, de
donde deriva "físico", significaba en la época presocrática, cuando
la filosofía, la religión y la ciencia no estaban aún separadas, la
"realidad fundamental". Esta misma raíz, en las lenguas indoeuropeas,
se ha convertido en braham que, en sánscrito, significa también la
"realidad fundamental". Un mismo origen da, por lo tanto, nacimiento a
la "ciencia" en Occidente y al "misticismo" en Oriente.
*
Intentando sintetizar de alguna manera lo complejo de
lo abstracto a la luz de la moderna ciencia física me
quedo con lo expuesto por uno de los 4
sires del pensamiento moderno. Sir James Jeans
manifestó:
La
tendencia de la física moderna es resolver todo el universo
material en ondas, y nada más que ondas. Comenzamos a
sospechar que tal vez
debemos saludar a la
Inteligencia como creadora y legisladora del Reino de
la
materia.
Creo
que la mente tiene el poder de afectar a los
grupos de
átomos
interfiriéndose en la conducta de los mismos e incluso que la
voluntad
de los seres humanos puede alterar el curso del mundo aunque este curso
esté predeterminado por leyes físicas.
El Universo en que vivimos es creación de nuestros
pensamientos.
Después
de la
mecánica ondulatoria, el mundo se parece más a un
pensamiento que a una
máquina.
El ego y el mundo no tienen una existencia
absoluta
y verdadera sino relativa. De esta manera el ego o el alma no
es más real que un reflejo de la luna sobre el agua, es una
sombra, un fenómeno compuesto proyectado por la realidad, pero
el espíritu microcósmico (no iluminado) lo cree una
cosa permanente y existente por sí mismo.
El material del universo es material mental.
El
Universo es como un pensamiento en la mente
de un matemático.
Hemos
descubierto que el
universo muestra huellas de un poder que planea
y controla todo. Tiene algo en común con nuestro espíritu
propio e individual;
lo común no estriba, según hemos visto, en el
sentimiento, en la moral o en el
placer estético, sino en la tendencia a pensar de una manera
que, a falta de
otra palabra, llamamos geometría. El Gran Arquitecto del
Universo empieza
ahora a perfilarse como un matemático puro.
La Ciencia
moderna nos impulsa a pensar en el Creador como elaborando fuera del
tiempo y del espacio, que son parte de su creación, justamente
como el artista
está fuera del lienzo.
La corriente del
conocimiento humano
está llevando imparcialmente hacia una realidad no
mecánica: el universo
comienza a parecer más que una gran máquina, un gran
pensamiento. La mente ya
no parece ser un intruso accidental en el campo de la materia. Estamos
comenzando a sospechar que deberíamos considerarla como la
creadora y
gobernante de este reino.
El Universo
puede ser mejor
representado, si bien aún muy imperfecta e inadecuadamente, como
consistiendo
en puro pensamiento, el pensamiento de lo que, por falta de una
expresión más
amplia, debemos describir como un pensador matemático.
No existe nada de lo que
veamos, todo
está sucediendo en nuestra mente.
Si el universo es un universo de pensamiento, su
creación tiene que
haber sido un acto de pensamiento.
La mejor
definición actual de Maya, sobre la base de la física
cuántica y la astronomía nos la da Sir
James Jeans, quien, en una breve frase lo dice todo al señalar:
No existe
nada de lo que veamos, todo
está sucediendo en nuestra mente
La física cuántica moderna además sostiene que:
La realidad no existe cuando no la estamos observando
Mientras escribo sobre este
tema que intento sacar de la élite pensante para exponerlo en
lenguaje coloquial, o vulgar según la élite, me nace pensar que el físico teórico
cuando usa la intuición mental, que es transpersonal, al hacerlo se
distancia a pasos agigantados de sus pares de la Ciencia que permanecen
ligados al método racional lineal.
*
De una vulgar lógica física
Cual profano de la física que lo soy, planteo:
Mi
mano, ¿en qué
se diferencia de este
vaso? En nada, pues mano y vaso son lo mismo, conjuntos de átomos girando a
gran velocidad
en lo que parece inmóvil. Todo lo que consideramos materia, no
es ni sólido ni
material sino que está formado por un 99.99% de vacío
sustentado en un 0.01 de
átomos, los que a su vez son un 99.99% de vacío
sustentado en partículas que
serían una probabilidad matemática. ¿Que le
permite a mi mano, parte de un cuerpo vivo ser diferente a un cuerpo
inerte como el vaso? Lo que le permite a
mi mano ser diferente
al vaso es que mi mano está regida por el alma que, por medio de
la mente, le
da la chispa de vida y el vaso no. Lo que nos hace creer, aceptar y vivir como
realidad
en lo vacío, es la mente programada por el alma para, en un
mundo de tercera dimensión,
transformar en real lo
que es ilusorio y así podamos cumplir este necesario ciclo
evolutivo sutil en lo Ilusorio o denso material.
A su vez cada sol está
separado del sol vecino por un 99.99% de vacío, siendo cada una
de sus partículas un 99.99% de vacío sustentado en una
probabilidad matemática llamada subpartículas. El
universo es vacío, es una ilusión mental.
La materia en lo que creemos es, no
lo es, sin embargo ese vacío está lleno de Inteligencia Pura fruto del
Divino Pensamiento de
Dios, que a lo inexistente le permite, en nuestra mente, existir. En lo
irreal, gracias a
la
mente, vivimos lo real, en un Universo donde todo está regido
por
un orden mental perfecto al igual que en los universos de dimensiones
más
sutiles. Todo creado por la
Programación
Divina con un
Propósito de vida que
hemos olvidado y debemos recordar.
Mientras
vivamos con una mente programada para aceptar como real
la ilusión material, esa ilusión pasa a ser realidad
y esta realidad, si supiéramos manejar la mente, nos
haría ser dioses entre los mortales.
*
Conclusión
En el año 1981 al escribir mi primer libro "La Respuesta es:", expuse:
Maya es otro controvertido concepto hindú, significa
ilusión,
para algunos todo es ilusorio siendo lo divino lo único real. Sin
embargo, si se analiza bien el concepto se
entiende
que el mundo y el Universo son reales para nuestra percepción mental de
este plano de evolución. No nos damos
cuenta
que esos conceptos ilusorios son creados por nuestras mentes las que
hacen ser "real" lo inexistente. Maya es
la
ilusión de confundir
una
foto de la Tierra con el territorio terrestre. En la visión
hindú
de la naturaleza por lo tanto, todas las formas son relativas, fluidas,
en el siempre cambiante maya. El mundo de maya cambia continuamente.
Conviene
tener presente la moderna física y veremos la realidad de Maya.
Mientras esto escribo ya no soy el mismo pues mis células han
cambiado...
Nada es lo mismo entre lo que me rodea dado que sus partículas y
átomos
han cambiado. Millones de neutrinos atraviesan mi cabeza sin yo notarlo
y sin ellos tener idea de mi existencia por ser tan infinitamente
pequeños. Si yo fuera de neutrino en vez de átomos, este mundo material no existiría.
Todo es diferente a cada instante: Ondas cambiantes. Todo es constante ritmo y vibración, nada
es estático e igual, sin embargo, sigue siendo real aunque
diferente,
pero lo ilusorio deja de serlo por estar así programada nuestra mente desde antes
de nacer. Siendo el programador la propia alma. Lo ilusorio está en la
percepción
que yo tengo al no captar las cosas en su esencia sino que en su
apariencia, al captar como real lo que no es y al no captar lo real que es.
Maya la ilusión nace por la falta de discernimiento al ser el
discernimiento un atributo del alma que está por sobre el maya de la
materia.
Han pasado 27 años y, en lo personal, esa descripción
dejada sobre Maya sigue plenamente vigente, a diferencia de una serie
de paradigmas de la Ciencia que en ese lapso de tiempo han dejado de
ser. Por ejemplo en Diciembre del 2007 señalé:
En un mundo académico en
general materialista no es fácil apartarse de la "In" Modernidad de moda y
mirar más allá del cerebro hacia lo que al cerebro le permite ser… No le es
fácil al matemático, físico y científico en general salir
del paradigma que, por dogma científico, los mantiene ligados a lo racional
material, cual tabla de salvación del racionalismo encadenado al concepto absoluto de lo
material, y no pueden siquiera aceptar la idea de pensar en la posibilidad de
que la materia NO SEA y sea Maya o Ilusión, por ser todo una ideación mental, y
que el Universo no sea obra de un aleatorio Big Bang, sino fruto del
Pensamiento de un Programador que es DIOS: Un GOD BANG. Sin embargo, como lo hemos visto, han sido connotados
matemáticos, físico teóricos y científicos los que, en un punto de su personal
análisis saltaron de manera cuántica mental a la dimensión de lo transpersonal
y vieron por sobre los árboles de la racionalidad el bosque de lo cósmico cómo
surgía una nueva realidad que la Ciencia, con su método no podrá ver, entender
y menos explicar lo que a lo Ilusorio material gracias a la mente
le permite ser…
Para concluir afirmo que
acepto la Enseñanza que señala a la materia como una
Ilusión de la mente, pero a su vez intuyo que por
algo y para algo hemos nacido en un ascendente ciclo de vidas con
mente humana, dotados para discernir que
esto ilusorio es nuestra realidad de Vida. Sugiero no hacer
lo que algunos hindúes convencidos de Maya hicieron al afirmar que el
tigre era una ilusión y esa ilusión los mató, o
que el fuego era una ilusión y esa ilusión los
quemó. Ellos olvidaron que tenían mente humana programada
desde antes de nacer para aceptar la ilusión material como una
realidad natural de vida. Lo que sí, con nuestra humana mente
podemos realizar, es revertir lo negativo en positivo reprogramando la
propia mente mediante un Mejor Pensar.
Con mi posición de pensamiento mento-espiritual al escribir esto me pregunto:
¿Por
qué me meto entre las patas de los caballos del predominante
racionalismo irracional para el cual la única realidad es lo
cerebro-material que nos tiene al borde del abismo? Me respondo: Lo
hago para enfatizar que,
por ejemplo, el Cambio Climático que superó a ese
racionalismo
vaticinando un cercano mundo desolado, vacío, despoblado; no es
real:
¿Cómo que no es real? ¿Qué es entonces
si a diario lo vivimos, y padecemos? ES UNA MALA ILUSIÓN
mental colectiva nuestra. Al estar nosotros por sobre lo
cerebro-material y
cambiar, en forma consciente y voluntaria la percepción mental
del dominante pensamiento negativo hacia la
del
Pensamiento Positivo, podemos revertir la
ilusión negativa.
Al así hacerlo, con Actitud Mental Positiva,
lograremos, en vez de un caos final, un Mundo Mejor. Y lo lograremos
sin importar si la realidad es
o no es, pues por algo estamos mentalmente inmersos en lo que para
todos nosotros es. Y esa ES la
razón de
SER del Portal que recibe este nuevo título lanzado al
CiberEspacio mientras el eclipse total de Luna está en su apogeo
engalanando la despejada noche de Quilpué. Me
pregunto: De lo que estoy viendo ¿qué es real?
El tiempo se detiene, el espacio se comprime y recibo La Respuesta:
El hacedor de Sueños eres TÚ
Si Piensas Bien dormirás mejor
Si la vida es sueño aprende a soñar
Si la vida
es ilusión haz de lo ilusorio una mejor realidad
Si has nacido en el sueño ten un Buen Despertar
Eres un Soñador en el que la Ilusión es TÚ REALIDAD
CiberComentario de un Amigo CiberLector:
Iván:
El tema de la realidad, la irrealidad y la no-realidad han estado vigentes en
nosotros prácticamente desde que Pitágoras adelantara el vocablo "filosofía". Mucho
se ha escrito sobre esto. Como concepto al fin, está signado por el contexto
cultural al que se pertenece. Digo esto, porque como bien señalas en tu
delicioso articulo: "igual que existe un universo escalar con diferentes
niveles de evolución para cada dimensión, existen mentes acordes para actuar en
cada nivel de evolución..." Coincido plenamente contigo. Si hipotéticamente
pudiésemos salir de nuestro Sistema Solar veríamos como el concepto de
espacio-tiempo sería otro totalmente diferente y por tanto, la realidad sería
otra. Mejor aun, estaríamos inmersos en diversas realidades acorde a los
diversos espacio-tiempos. Es como el concepto de "vida". Acorde
a nuestra taxonomía, la vida es expresión de la dinámica de lo que hemos dado
en llamar "materia orgánica" Pero, ¿...sería esa la única manifestación
en el universo de lo que llamamos "vida"? Volvamos a la realidad
y apoyémonos por un instante en la sicopatología: la percepción estadísticamente
avalada de un objeto, sería la realidad "normal"; la percepción
distorsionada de un objeto, sería una ilusión y por ultimo la percepción de un
objeto inexistente, sería una alucinación. Pues bien, cada uno de estos fenómenos
perceptuales en si mismos pudieran tener sus propias reglas lógicas y metodológicas. Entonces,
acorde a esta línea de abordaje intelectual podemos concebir a la percepción estadísticamente
avalada, como la realidad; a la ilusión, como la irrealidad y a la alucinación,
como la no-realidad. Entonces surgiría una pregunta obligada: ¿cuál de las
tres es valida? Pues las tres, obviamente. ¿De qué dependería la
validez? Del punto a partir del cual deseemos concebir el objeto de
estudio. Por tanto, mi querido amigo Iván, nadie mejor que tú para con tus
mismas palabras concluir mi modesto comentario: "...Maya la ilusión nace
por la falta de discernimiento al ser el discernimiento un atributo del alma
que está por sobre el maya de la materia."
Un abrazo, Guillermo.
Dr. Iván Seperiza
Pasquali
Quilpué, Chile
Febrero de 2008
MUNDO
MEJOR
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